La oración compuesta.
La oración compuesta es aquella que está formada por más de un verbo o perífrasis verbal, es decir, por más de una proposición u oración. Cuando dos oraciones o proposiciones se unen, las estructuras oracionales formadas por ellas pueden ser de diversos tipos según la relación que se establezca entre ellas. Así, tenemos:
a.- Oraciones coordinadas:
La relación entre dos oraciones es de coordinación cuando ambas se encuentran en el mismo nivel jerárquico o sintáctico, es decir, cuando ninguna cumple una función sintáctica dentro de la otra. Este tipo de estructura se denomina conjunto oracional por coordinación u oración compuesta.
Los policías buscaban alguna prueba, pero no encontraron nada.
Oración coordinada 1 nexo Oración coordinada 2
El nexo que une las oraciones coordinadas no forma parte de ninguna de las dos oraciones.
b.- Oraciones subordinadas.
La relación entre dos oraciones es de dependencia cuando una de las dos es una oración subordinada, es decir, cuando una oración cumple una función sintáctica dentro de la otra; la oración subordinada puede complementar a otra oración o a un elemento de otra oración. Por esto la relación de subordinación puede establecerse de dos maneras:
b.1.-Una oración subordinada, encabezada o no por un nexo, complementa a toda una oración (llamada oración -o proposición- principal). Esta estructura se denomina conjunto oracional por subordinación u oración compuesta. Por ejemplo:
A pesar de estar exhaustos, los escaladores alcanzaron la cumbre.
oración subordinada oración principal
b.2.-Una oración complementa a algún elemento de la oración, no a la oración completa; pueden ser: el sujeto, alguno de los complementos del verbo, de un sustantivo, de un adjetivo o de un adverbio. Esta estructura se denomina oración compleja.
El director me dijo que archivara esos informes
- subordinada→ CD del verbo ‘decir’
En estos casos, no hay oración principal (aunque algunas gramáticas analizan como proposición principal lo que no pertenece a la subordinada), ya que la subordinada no complementa a toda la oración, sino a alguno de sus elementos.
Las oraciones complejas (aunque dentro de esta clasificación también están integradas las oraciones compuestas o conjuntos oracionales por subordinación) pueden clasificarse según la función que desempeña en ellas la oración subordinada:
– Subordinadas sustantivas: Tienen las mismas funciones que el SN dentro de la oración compleja: Es muy necesario que todos estemos unidos en las situaciones difíciles.
– Subordinadas adjetivas: Ejercen las mismas funciones que los sintagmas adjetivales dentro de la oración compleja: He perdido los informes que me entregaron.
– Subordinadas circunstanciales: desempeñan la función de complemento circunstancial en la oración compleja (y otran en los conjuntos oracionales por subordinación): No voy a la piscina porque hace frío.
c.- Relación por yuxtaposición.
En los dos casos anteriores una oración está unida a otra por un elemento que sirve de nexo entre ellas (conjunción, locución conjuntiva, adverbio…). Sin embargo, a veces las oraciones se unen sin ningún tipo de nexo, es decir, por yuxtaposición. Las oraciones yuxtapuestas son independientes en cuanto a la función, pero puede haber entre ellas distintas relaciones de significado (adición, contraposición, sucesión temporal, causalidad, consecuencia…)
Tengo frío: debo de tener fiebre → Relación de consecuencia.
No pares, insiste, continúa hasta el final → Relación de adición.
1.- Oraciones coordinadas.
Como ya hemos visto, la coordinación se produce cuando no hay entre las dos oraciones o proposiciones que forman la oración compuesta ninguna relación de dependencia sintáctica mutua. Aunque se junten para producir un significado superior combinándose, tienen la misma jerarquía desde el punto de vista gramatical. Las oraciones coordinadas se dividen habitualmente en cuatro tipos:
1.1.- Copulativas: La relación semántica entre las oraciones coordinadas copulativas es de simple adición o suma. Su nexo afirmativo es la conjunción copulativa y (e, delante de /i-/). Su nexo negativo es ni, que puede repetirse o no.
Heinrich Schliemann nació en Neubucow y se crió en Fürstenberg
1.2.- Disyuntivas: Las coordinadas disyuntivas indican exclusión, es decir, elección entre varias opciones. El nexo es la conjunción disyuntiva o (u, delante de /o-/), que pude repetirse, y también la locución conjuntiva o bien.
O vienes conmigo o te quedas en casa
1.3.- Adversativas: Expresan oposición o contradicción entre los significados de las oraciones. Pueden ser de dos tipos:
1.3.1.- Restrictivas o correctivas: Cuando expresamos una corrección o restricción en el juicio de la primera oración, pero no incompatibilidad entre ambas oraciones. Sus nexos son: pero, sin embargo, no obstante, antes bien, en cambio…
La policía buscó pruebas dentro de la casa pero no encontró nada.
1.3.2.- Exclusivas o excluyentes: Cuando hay incompatibilidad entre ambas oraciones, de manera que se excluyan totalmente entre sí. La primera oración es siempre negativa. Su nexo es sino que.
Pedro no sólo ganó la carrera, sino que batió el récord
1.4.- Explicativas: Cuando una oración se limita a aclarar el significado de la anterior, ya que repiten idéntico contenido semántico bajo distintas formas: Sus nexos, a pesar de su forma verbal, son locuciones conjuntivas: es decir, esto es, o sea.
Ésta es una oración compuesta, es decir, tiene dos ó más predicados.
Algunas gramáticas, entre las que está la de la Real Academia, a estos cuatro grupos de coordinadas, le añaden otro tipo más: las distributivas, que en otros manuales las analizan como yuxtapuestas. La misma RAE dice que “no se enlazan entre sí por medio de conjunciones, sino por yuxtaposición: su nexo lo constituyen palabras correlativos, o bien la simple repetición de palabras iguales”, como uno…otro, este…aquel, cerca…lejos, aquí…allí, tan pronto…como, ya…ya, tal…tal, bien…bien, etc.
2.- Oraciones o proposiciones subordinadas.
La subordinación es la relación que existe entre dos oraciones o proposiciones cuando una de ellas depende funcionalmente de la otra, es decir, las oraciones subordinadas son aquellas que cumplen una función sintáctica dentro de otra. Así, la oración subordinada funciona igual que en la oración simple, el sustantivo, el adjetivo y el adverbio; por ello, distinguimos tres tipos de proposiciones subordinadas:
– Subordinadas sustantivas;
– Subordinadas adjetivas;
– Subordinadas adverbiales.
2.1.- Oraciones o proposiciones subordinadas sustantivas.
Son aquellas que desempeñan en el seno de otra proposición u oración la misma función que desempeñaría un sustantivo o sintagma nominal, con excepción de la función de complemento circunstancial; además se pueden sustituir por un sintagma nominal o el pronombre neutro “eso”. El nexo fundamental de las subordinadas sustantivas es la conjunción anunciativa que; también lo son en las interrogativas indirectas la conjunción si, y los pronombres y adverbios interrogativos.
2.1.1.- Clases de oraciones o proposiciones subordinadas sustantivas.
Las oraciones subordinadas sustantivas se suelen dividir atendiendo a la función que desempeñan:
a.- Subordinadas sustantivas en función de sujeto: Desempeñan la función de sujeto del verbo de la oración principal. Siempre se pueden sustituir por el pronombre neutro eso, que concuerda obligatoriamente con el verbo de la proposición principal.
Tienen frecuentemente las siguientes estructuras:
- CI + Verbo de afección anímica + Sub. sustantiva sujeto: → que…
→ infinitivo…
Me gusta que haga sol → Me gusta eso
CI O. Sub. Sus. Sujeto
Me gusta jugar al fútbol los sábados. → Me gusta eso
CI O. Sub. Sus. Sujeto
- Verbo copulativo + Atributo + Sub. sustantiva sujeto: → que…
→ infinitivo…
Es necesario que se revise la instalación del gas. → Es necesario eso Atributo O. Sub. Sus. Sujeto
Es imposible detener la riada → Es necesario eso
Atributo O. Sub. Sus. Sujeto
b.- Subordinadas sustantivas en función de complemento directo: Constituyen el grupo más numeroso; funcionan como CD del verbo de la proposición principal. Se pueden sustituir por el pronombre neutro lo. Normalmente acompañan a verbos de percepción física (ver, oír, observar, escuchar…), verbos de lengua (decir, afirmar, preguntar…), verbos de entendimiento (saber, pensar, ignorar, dudar…), verbos de temor, de deseo (temer, anhelar, desear, querer…) y, por último, verbos verbos de mandato o de prohibición (mandar o prohibir). Como en cualquier proposición subordinada sustantiva, el verbo puede ser un infinitivo.
Pienso comprarme un nuevo coche.
Sabía que el director elegiría a Pablo.
Entre las subordinadas sustantivas de CD destaca:
b.1.- Las interrogativas indirectas: Se dan cuando se hace depender de una principal con verbo de entendimiento o de lengua, una oración interrogativa. El nexo de las interrogativas indirectas totales es la conjunción si:
Le he preguntado si iba a venir a la fiesta esta noche.
El nexo de las interrogativas indirectas parciales es un pronombre o un adverbio interrogativos, siempre tónicos y con acento ortográfico o tilde:
No sé quién va a asistir a la reunión mañana.
Dime dónde has dejado las gafas.
b.2.- El estilo directo y el estilo indirecto: Existen varias formas de expresar la subordinada sustantivas con verbos de entendimiento o de lengua. :
b.2.1.- En el estilo directo se reproduce el enunciado tal y como lo formula el hablante, es decir, textualmente:
Fue en esa ocasión cuando Aureliano le oyó decir: Si no temes a Dios, témele a los metales.
Lo haré con mucho gusto, José Raquel -dijo el coronel Aureliano Buendía.
-Nada -contestó Meme-. Que apenas ahora descubro cuánto las quiero.
(Gabriel García Márquez, Cien años de soledad)
b.2.2.- En el estilo indirecto existe nexo de subordinación y se realizan los cambios oportunos en los tiempos verbales y en los deícticos, es decir, en los señaladores de tiempo, lugar, modo, posesivos, etc.
Juan dijo: Esta noche voy a tu casa. → Juan dijo que esa noche iría a mi casa.
c.- Subordinadas de complemento del nombre (CN). Funcionan como un adjetivo dentro del sintagma nominal, al complementar al núcleo. Siempre van precedidas de una preposición y, normalmente, se sitúan detrás del sustantivo al que complementan. Su estructura es la siguiente:
(Det.) + Núcleo + Preposición + Sub. Sust. CN: → que…
→ infinitivo…
Tengo ganas de que llegue Juan
d.- Subordinadas sustantivas de complemento del adjetivo (C. Adj.): Complementan a un adjetivo. Van precedidas de preposición y se sitúan tras el adjetivo al que complementan. Su estructura es:
Adjetivo + Preposición + Sub. Sust. CAdj: → que…
→ infinitivo…
Estoy harto de fregar los platos
e.- Subordinadas sustantivas de complemento del adverbio (C. Adv.): Complementan a un adverbio; tienen la misma estructura que las anteriores. Van precedidas de preposición y se sitúan tras el adverbio al que complementan. Su estructura es la siguiente:
(Det.) + Núcleo + Preposición + Sub. Sust. CN: → que…
→ infinitivo…
Estoy cerca de alcanzar los objetivos.
f.- Oraciones subordinadas sustantivas de atributo: Siempre van con verbos copulativos en la oración principal. Se pueden sustituir siempre por lo.
Marta está que trina
g.- Subordinadas sustantivas de complemento indirecto (C.I.): Son oraciones que dentro de la oración compleja, ejercen la función de complemento indirecto. Siempre se pueden sustituir por le.
Siempre doy importancia a que la gente sea amable.
h.- Subordinadas sustantivas de suplemento o de complemento de régimen. Estas oraciones desempeñan la función de complemento de régimen o de suplemento en una oración compleja. Siempre van precedidas de una preposición que exige el verbo principal y que actúa de enlace entre el verbo y la subordinada.
Confío en que obtengas un buen resultado.
2.2.- Oraciones subordinadas adjetivas o de relativo.
Cumplen la misma función que los adjetivos adjuntos, es decir, unidos a un sustantivo. Forman parte de un sintagma nominal en el que complementan o modifican al sustantivo directamente. El nexo que introduce las oraciones subordinadas adjetivas en normalmente un pronombre relativo: (el, la, lo, los, las) que, {el, la, lo} cual; {los, las} cuales, quien, – es, cuanto, -a, -os, -as. También puede ser nexo de las oraciones subordinadas de relativo el adjetivo posesivo: cuyo, -a, -os, –as. Las funciones de los pronombres de relativo son varias:
– Sirve de nexo, enlace o unión.
– Cumple una función sintáctica dentro de la oración subordinada adjetiva o de relativo. Para saber la función sintáctica que cumple el pronombre relativo dentro de la oración subordinada adjetiva, podemos sustituirlo por el antecedente al que él sustituye; la función sintáctica que cumpla el antecedente dentro de la oración subordinada adjetiva, es la misma que cumple el pronombre relativo. Por ejemplo:
Los alumnos que han aprobado pueden hacer la matrícula.
Antecedente = Oración de relativo
Los alumnos han aprobado = que han aprobado
Sujeto Sujeto
– Es el sustituto de un sintagma nominal, normalmente presente en la oración principal, llamado antecedente; no obstante, dicho no puede aparecer en la oración.
2.2.1.- Clases de oraciones subordinadas adjetivas o de relativo: Al igual que los adjetivos calificativos, las proposiciones subordinadas adjetivas, pueden ser explicativas o especificativas:
a.- Explicativas. Normalmente aparecen entre comas o pausas. El antecedente del pronombre relativo está ya determinado y la adjetiva ya no es necesaria para identificarlo, simplemente añade una precisión o descripción del antecedente sin restringir su extensión.
Mi primo, que estudia empresariales, me ha aconsejado varias inversiones.
A veces, las subordinadas adjetivas poseen un cierto valor causal: Los alumnos, que no habían estudiado, suspendieron.
b.- Especificativas. No van entre comas. Restringen la extensión del antecedente y son, por tanto, necesarias para identificar al sustantivo. Su supresión altera totalmente el contenido informativo del sintagma en el que el se halla.
Los alumnos que son mayores de edad no han de traer el justificante.
- Funciones de las oraciones subordinadas adjetivas o de relativo.
Las funciones dependen de si llevan antecedente expreso o no:
I.- Con antecedente expreso.
La oración subordinada adjetiva funciona siempre como complemento del nombre.
Los libros que he comprado tienen mucho valor.
O.sub.Adjetiva CN
II.- Sin antecedente expreso.
Se encuentra sustantivada y por, lo tanto, cumple las mismas funciones sintácticas que un sintagma nominal:
II.a.- De sujeto: Los que van a la excursión deben traer el dinero mañana.
II.b.- De CD: Esta empresa ha seleccionado a los que tienen mejor expediente.
II.c.- De CI: El director ha entregado los diplomas a los que han aprobado el curso.
II.d.- De suplemento: Esta empresa cuenta con los que tienen mejor expediente.
II..e.- De CN: Estos son las solicitudes de los que optan a la plaza.
II.f.- De CAdj.: El presidente está contento con los que han hecho la presentación.
II.g.- De CAdv.: Estos pisos están cerca de los que construyeron el año pasado.
2.3.- .Oraciones subordinadas circunstanciales.
Cumplen la función de complemento circunstancial del verbo principal.
2.3.1.- Clases de oraciones subordinadas circunstanciales.
Existen nueve tipos de oraciones circunstanciales, que se suelen agrupar en dos bloques:
2.3.1.1.- Oraciones subordinadas circunstanciales adverbiales.
Se pueden sustituir siempre por un adverbio. Existen tres tipos:
a.- Oraciones subordinadas circunstanciales adverbiales de lugar. Son el complemento circunstancial del verbo principal. Se pueden sustituir por adverbios de lugar, como allí. Su nexo principal es donde, que puede llevar preposición.
Voy a ir donde me han recomendado → Voy a ir ALLÍ
b.- Oraciones subordinadas circunstanciales adverbiales de tiempo. Indican el tiempo en el que ocurre la acción de la oración principal. Se pueden sustituir por un adverbio de tiempo, por ejemplo, entonces. Su nexo principal es «cuando», pero tienen otros muchos: tan pronto como, después de (que), antes de (que), mientras (que), hasta (que), al + infinitivo…
El pueblo se queda incomunicado cuando llegan las nieves → El pueblo se queda incomunicado ENTONCES
c.- Oraciones subordinadas circunstanciales adverbiales de modo. Indican como se realiza la acción de la oración principal. Se pueden sustituir siempre por el adverbio así. Su nexo fundamental es como, pero también lo son según, de la (misma) manera que, del mismo modo que, como si. También son adverbiales de modo las oraciones con gerundio.
El director salió del despacho dando gritos → El director salió ASÍ
He cocinado las judías como me enseñó mi abuela → He cocinado las judías ASÍ
2.3.1.2.-Oraciones subordinadas circunstanciales no adverbiales.
Estas oraciones no se pueden nunca sustituir por un adverbio. Existen seis tipos:
a.- Oraciones subordinadas circunstanciales no adverbiales comparativas. Indican comparación de un término de la oración principal con uno de la subordinada, cuyas funciones sintácticas son las mismas. Se relacionan con el grado del adjetivo. La subordinada suele aparecer sin verbo. Sus nexos son correlativos disjuntos. Pueden ser:
a.1.- De superioridad: Más… que: Es más alto que su hermano.
a.2.- De inferioridad: Menos… que: Tengo menos días de vacaciones que tú.
a.3.- De igualdad: Tan… como: Es tan alto como su hermano.
Hay que señalar que en castellano tenemos cuatro adjetivos que están heredados del latín:
Grande – Mayor.
Pequeño – Menor.
Bueno – Mejor.
Malo – Peor.
Dichas formas pueden ir seguidas de oraciones subordinadas circunstanciales de superioridad con la conjunción que.
Esta casa es mayor que la tuya.
b.- Oraciones subordinadas circunstanciales no adverbiales causales. Indican la causa de la oración principal. Su nexo fundamental es porque, aunque también encontramos puesto que, ya que, como, por + infinitivo y debido a (que).
No grites que está durmiendo el niño.
No arregló el coche porque no tenía tiempo.
Lo entendió enseguida, pues sabía francés.
Cambió de trabajo puesto que estaba harto de sus jefes.
No vi la película, ya que no conseguí las entradas.
Lo detuviron por robar en un banco.
Como fui tarde, no me dieron número.
c.- Oraciones subordinadas circunstanciales no adverbiales consecutivas.
Son consecuencia de la oración principal. Señalan la misma relación que las causales pero inversa:
No compré el disco porque no lo tenían (causal) →
No tenían el disco, por lo tanto, no lo compré (consecutiva).
Se suelen dividir en dos tipos:
c.1. Consecutivas con principal no intensiva.
Sus nexos son por lo tanto, así que, luego, por consiguiente, de manera que:
Pienso, luego existo.
No había entradas, así que no fuimos al cine.
Van a construir más carreteras, por consiguiente los impuestos subirán.
Me han invitado a comer, por lo tanto, tendré que ir.
c.2.- Consecutivas con la principal intensiva.
Son consecuencias ligadas a un elemento cuantitativo intensificativo en la oración principal que puede ser un adjetivo, un pronombre, un adverbio… correlativo con la conjunción que de la subordinada. Sus nexos son:
Tal/tales – que: Les da tales disgustos a sus padres que están muy preocupados.
Tan/tanto – que: Se ha esforzado tanto que merece un premio.
Tanto/tanta – que: Ha comido tanto pan que ahora lo odia.
Tantos/tantas – que: Ha comprado tantos muebles que no le caben en la casa.
También encontramos consecutivas con la principal intensiva con locuciones conjuntivas fijas como nexos: de tal manera que, en grado tal, de tal modo que, hasta tal punto que:
Estudia de tal manera que va a aprobar con muy buena nota.
Habla de tal modo que nadie le entiende.
Conozco a Juan hasta tal punto de que sélo que piensa.
d.- Oraciones subordinadas circunstanciales no adverbiales concesivas.
Indican un hecho que supone un obstáculo para el cumplimiento de lo expresado por la oración principal, pese al cual esta se realiza. Su nexo fundamental es aunque, pero también pueden serlo a pesar de (que), aun + gerundio, aun cuando, mal que, por más que.
Sigue haciendo deporte aunque ya es mayor.
Seguiré entrenando, aun cuando no juegue el partido.
Creerán que lo hizo él, aun siendo inocente.
No lo encontraré por más que lo busque.
e.- Oraciones subordinadas circunstanciales no adverbiales finales. Indican la intención por la que se realiza la acción principal. Sus nexos fundamentales son para que, para + infinitivo, con el fin de (que), con el propósito de (que), con vistas a que, con la intención de (que).
Vendré para que me expliques ese asunto.
Eso os lo dijeron con el fin que estéis contentos.
He comprado esta taladradora para poder colgar los cuadros.
f.- Oraciones subordinadas circunstanciales no adverbiales condicionales. Expresan la condición necesaria para que se produzca lo expresado por la oración principal. La oración subordinada (la que lleva el nexo) se denomina prótasis, y la oración principal apódosis.
Si vienes, te esperaremos.
prótasis apódosis
Su nexo principal es la conjunción si y todos los nexos que se puedan conmutar por ella.
Como no estudies más, no vas a aprobar.
Cuando él lo dice, será verdad.
Iré en el caso de que me necesiten.
No pediré prestado, a menos que lo necesite.
Las subordinadas o prótasis pueden construirse en indicativo o subjuntivo:
f.1.- Se construye en subjuntivo:
f.1.1.- Cuando la condición es de cumplimiento imposible (condicionales irreales):
Si hubiera visto la película, habría sabido el final.
Si viviera tu padre, estaría orgulloso de ti.
Si hubiéramos hecho caso, habríamos acertado.
f.1.2.- Cuando la condición es de cumplimiento posible, pero el hablante la formula con un matiz subjetivo de duda, temor, súplica, deseo… acerca de su cumplimiento (condicionales potenciales):
Si le subiera la fiebre, tendríamos que llamar al médico.
Si hubiera llegado ya, nos recibiría enseguida.
Si aprobara en junio, ¡qué verano me iba a pasar!
f.2.- Se construye en indicativo, cuando la condición es de cumplimiento posible y el hablante se limita a exponerla subjetivamente (condicionales reales):
Si le sube la fiebre, tendremos que llamar al médico.
Si te molesta el sol, echa la persiana.
Si ha llegado ya, nos recibirá enseguida.