El mito de la Creación y el diluvio.
«Prajapati creó la luz, el cielo, la tierra y los dioses y luego al primer hombre, Yami, que con su hermana Yama engendraron a las primeras personas, que vivían en una edad de oro en la que todos los seres hablaban el mismo lenguaje.
Pero el paraíso degeneró, los humanos se volvieron malvados y los dioses decidieron empezar. Para ello enviaron un diluvio que acabó con todos los humanos menos con uno, Manu, que era justo y aún efectuaba ofrendas a los dioses. El dios Vishnú se encarnó en un pez y salvó a Manu.
Tras el diluvio, Manu, último superviviente de la humanidad original, efectuó los sacrificios y rituales necesarios para agradar a los dioses, y éstos le concedieron una mujer y le encargaron repoblar la tierra.»
Este mito insiste en la importancia del sacrificio y las ofrendas a los dioses, consideradas un deber sagrado de todo hombre justo. Asimismo, muestra el papel secundario al que relegaban a las mujeres, que sólo son concesiones de los dioses al «hombre justo».