El título podría ser el de una película de ciencia ficción de serie B, pero no engaña a nadie, en realidad, porque ya es famoso el aparato en cuestión. No solamente por su precio (bastante), sino por las operaciones de alta precisión que es capaz de realizar, incluso a distancia. Antes del COVID ya llevaba unos cuantos años trabajando telemáticamente y se hablaba de maravillosas operaciones dirigidas desde España y realizadas en el hospital Johns Hopkins de Nueva York.
La cirugía robótica ha alcanzado la madurez (los primeros actos quirúrgicos datan del año 2000). De fáciles intervenciones, de apéndice o próstata, se ha pasado a la cirugía cardiovascular, la neurocirugía o los trasplantes.
Precisamente es en esta especialidad, en la que nuestro país es referente mundial, en la que se ha producido la noticia que nos ocupa. Un equipo del hospital Vall d’Hebron, de Barcelona, ha logrado un hito histórico, al conseguir realizar un trasplante de pulmón utilizando la cirugía robótica.
La operación ha sido un éxito, y el postoperatorio, estupendísimo, dado que la incisión ha sido mínima: 8 centímetros, cuando la apertura hasta ahora era de 30, y mucho más traumática (se abrían y separaban las costillas). La vía de abordaje ha sido, con esta técnica, la zona bajo el esternón.