El Banco Central Europeo va un paso más allá. La institución pasará a pagar por los préstamos que concede a los bancos, siempre que las entidades financieras usan ese dinero para conceder crédito a la economía real. Así lo explica el comunicado oficial el BCE, después de que Draghi lo haya dejado entrever en la rueda de prensa que ha concedido hoy.
Las nuevas operaciones de refinanciación a largo plazo (TLTRO II) se podrían conceder a «un interés tan bajo como el de la facilidad de depósito», ha explicado Draghi. La facilidad de depósito a día de hoy se encuentra en el -0,4%, es decir, que el BCE podría remunerar sus préstamos a los bancos hasta con un 0,4% si estos los utilizan para dar crédito a la economía real (familias y empresas).
Tal y como señala el comunicado publicado por el BCE, «las entidades de contrapartida (bancos) que superen la cantidad media de crédito concedido, podrán pedir prestado (al BCE) a un tipo de interés que podría llegar a ser tan bajo como el de la facilidad de depósito en el momento de su asignación».
Si esta operación se produjese hoy, los bancos tendrían una remuneración del 0,4% por el dinero que piden prestado al BCE. Es decir, al revés de lo que venía siendo normal, los bancos podría recibir dinero por pedir préstamos al BCE, en lugar de pagar intereses al BCE a cambio de liquidez. El mundo al revés.
El tipo principal de refinanciación (que es hoy del 0%), será el tipo de salida aplicado en estas operaciones. Los bancos cuya capacidad neta de financiación supere el punto de referencia en el periodo que va del 1 de febrero de 2016 hasta el 31 de enero de 2018 «se le cobrará una tasa más baja sobre todo el plazo de la operación». Es decir, como se destaca en el primer párrafo, aquellos bancos que se comporten mejor a ojos del BCE (que den más crédito a la economía real), podrían llegar a tener el mismo tipo que el de la facilidad de depósito (-0,4%).
Este tipo de interés variará según el porcentaje en el que los bancos superen la cantidad de ‘referencia’ de crédito concedido. Es decir, aquellos que concedan mayor porcentaje de crédito a la economía real podrían beneficiarse de ese tipo del -0,4%, mientras que otros que otorguen una cantidad menor podrían optar a un -0,3% (por ejemplo), y así sucesivamente hasta alcanzar el tipo principal de refinanciación, que hoy está en el 0%.
Esta serie de cuatro operaciones de refinanciación a largo plazo (TLTRO II) tendrán cada una un vencimiento de cuatro años. Este instrumento se pondrá en marcha en junio de este año y se prolongará hasta marzo de 2017, según ha explicado el Banco Central Europeo. Por lo que el vencimiento de la última operación de estas características será en marzo de 2021.
Un día de sorpresas
El Banco Central Europeo (BCE) también ha decidido bajar los tipos de interés al mínimo histórico del 0%. Asimismo, ha bajado el interés de la facilidad marginal de crédito al 0,25% (desde el 0,3%) y ha rebajado también la tasa sobre los depósitos hasta el -0,4%. Más allá de los tipos, la institución también amplia a la deuda corporativa los activos calificados como ‘inversión’, es decir, el BCE podrá comprar deuda de empresas no financieras.
Además, el BCE ha anunciado que ampliará su programa de compras mensuales hasta los 80.000 millones de euros. Este nuevo incremento se comenzará a ejecutar en abril de este año. Esto supone 20.000 millones más de euros al mes para la compra de estos activos. «Este programa estará activo hasta finales de marzo de 2017, aunque se podría prolongar todo lo que sea necesario», ha explica Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo.