El Régimen General de Trabajadores Autónomos (RETA) ha cerrado 2016 con un incremento de 26.211 autónomos, un 0,8% más, aunque ha sido una subida inferior a la registrada al cierre de 2015, cuando el aumento fue del 1,3%, según ha afirmado la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA).
El presidente de ATA, Lorenzo Amor, considera que las cifras de autónomos en 2016 no son «malas», pero que con medidas específicas que hubiesen fomentado el emprendimiento y la consolidación de los negocios autónomos en España hubiesen sido «mucho mejores».
Concretamente, la cifra final de autónomos en diciembre de 2016 ha sido de 3.194.210 personas. Sin embargo, a pesar de ser el cuarto año consecutivo en el que ha crecido el número de trabajadores por cuenta propia, el incremento ha sido inferior al de 2015 y 2014.
Amor ha recordado que 2016 cierra con una media de 72 nuevos autónomos cada día, mientras que en 2015 la cifra era de 116 personas. Por ello, cree que es «urgente» que se pongan en marcha las propuestas que la federación ha solicitado.
No obstante, para Amor, 2016 ha sido un «buen» año para el empleo, ya que hay más trabajo, menos parados, más autónomos y empresas y en el que se ha registrado un aumento en la contratación indefinida. Amor cree que es «fundamental y necesario» que se dé estabilidad política y se legisle a favor de los autónomos para continuar a lo largo de 2017 lo que se puso en marcha en 2015, que se ha visto estabilizado en 2016.
Por comunidades autónomas, Castilla y León ha liderado la pérdida de autónomos en 2016, tras registrar un descenso de 1.890 autónomos, cifra que supone una bajada del 1,9% y que está muy por encima de la pérdida de las otras siete regiones españolas que han visto descender el número de trabajadores por cuenta propia.
Según ATA, que esta región sea la que lidere las pérdidas tiene que ver con que todas sus provincias han perdido afiliados al RETA y con que incluso cuatro de ellas estén entre las ocho provincias que más pierden de España.
Junto con esta Comunidad Autónoma, Galicia (-0,8%), Extremadura (-0,7%), Asturias (-0,6%), Aragón (-0,5%), País Vasco (-0,4%), Cantabria (-0,3%) y La Rioja (-0,2%) han sido el resto de regiones que han visto descender el número de trabajadores autónomos al cierre del año.
Canarias, Baleares y Madrid, a la cabeza
Por el contrario, liderando el aumento de los emprendedores en 2016 se han situado Canarias (+2,3%), Islas Baleares (+2,2%), Madrid (+1,9%) y Andalucía (+1,8%). Por detrás, se han situado Valencia, con un aumento del 1,3%; Cataluña, con un 1,1%; Navarra, con un 1%; Murcia, con un 0,8%; y Castilla-La Mancha con una subida del 0,1% del número de sus autónomos.
En valores absolutos, ATA ha resaltado que Andalucía, Cataluña, Madrid y Comunidad Valenciana suman casi el mismo número de nuevos autónomos que en toda España. De hecho, las cuatro regiones son las que «tiran del carro» al sumar un total de 26.181 autónomos de los 26.211 de la media de incremento de autónomos en España.
Por provincias, la mayor pérdida se ha registrado en Soria, con un descenso del 2%, y en Salamanca y Teruel, con una reducción en ambas del 1,7%. Por otro lado, los mayores incrementos se han registrado en Málaga, con un incremento del 3,1%, y Gerona, Las Palmas y Tenerife, con un aumento en las tres del 2,3%.
Emprendedoras, líderes de creación de empleo
Teniendo en cuenta el género, el ritmo de creación de empleo autónomo femenino en 2016, con un aumento del 1,2%, ha sido superior al 0,6% registrado en el caso de los varones. En términos absolutos, de los 26.211 nuevos cotizantes de 2016, 12.959 fueron emprendedoras y 13.251 emprendedores.
Por sectores, el comercio, con una reducción de 4.099 trabajadores por cuenta propia, ha sido el que ha perdido un mayor número de autónomos. Por detrás de este se han situado la hostelería y la agricultura.
El resto de sectores ha cerrado el año con nuevas altas de cotizantes. El sector inmobiliario, actividades profesionales, sanitarias y educación han sido los que han registrado mayores crecimientos.