El sector servicios tiene más de dos millones de empresas, que son el 61% del total
España es un país de microempresas. Ni tan siquiera de medianas empresas, de entre 50 y 249 trabajadores. El 1 de enero de 2022 había 3.430.660 empresas activas, lo que supone un crecimiento del 1,9% respecto a la misma fecha de 2021 y, por lo tanto, en relación a la etapa de la crisis económica provocada por el coronavirus. Atendiendo a la evolución del último año, 382.960 empresas comenzaron el ejercicio de actividades económicas durante 2021, mientras que 316.340 tuvieron que cerrar. El 81,3% de las unidades registradas a 1 de enero de 2022 ya figuraban activas en la misma fecha del año anterior, según informó ayer el Instituto Nacional de Estadística en el Directorio Central de Empresas.
El caso es que el 83% de las 2.845.804 empresas activas tienen hasta dos trabajadores. Incluso, 1,91 millones eran sólo el empresario o trabajador autónomo, sin asalariados. Es decir, el 55,8% de los 3,4 millones de empresas.
Estos datos explican muchos problemas de la economía española. Por ejemplo, las dificultades de todo tipo que tienen las sociedades para crecer. Muchas empresas pertenecen al sector servicios, que es donde están las más pequeñas. Pero además, otras renuncian a crecer porque el incremento de su tamaño supone un aumento de sus obligaciones laborales y fiscales. Por lo tanto, todo esto explica el hecho de que la tasa media de paro histórica sea del 17% de la población activa, y su dificultad para bajar del 10%. Desde 2008, el segundo año de la crisis financiera, la tasa de desempleo no ha bajado del 10%.