Los expertos esperan más demanda laboral de másteres por la reforma universitaria

elEconomista.es     Martes, 10 de Febrero de 2015 

Las empresas de empleo creen que la reducción a tres años en la duración de las carreras determinará mayor exigencia de formación por parte del empleador. En la actualidad, tan sólo el 13% de las ofertas para directivos exigen postgrado

La reforma educativa ha puesto sobre la mesa el debate sobre la necesidad o no de cursar un postgrado o master. Desde que el gobierno anunciara dicha reforma, el ministro de Educación ha afirmado en repetidas ocasiones que, con el nuevo sistema, los estudiantes ahorrarán dinero al cursar las carreras en tres años en lugar de los cuatro actuales. Sin embargo, los expertos consultados por Ecoaula consideran que los grados generalistas -como se denominan en el nuevo decreto-, fomentará que los estudiantes realicen una especialización de dos años con el fin de alcanzar la formación consideran necesaria para el actual mercado laboral.

Actualmente, más del 13 por ciento de las ofertas destinadas a cubrir puestos directivos solicitan formación de postgrado, mientras que para los puestos técnicos ocurre en el 8,5 por ciento de las ofertas, según el último informe Adecco Professional sobre empleabilidad y postgrados. Los porcentajes bajan en el caso de las ofertas para mandos intermedios (5,8 por ciento) y empleados (el 3,3 por ciento).

Por su parte, en el campo formativo, el mundo empresarial es el que concentra un mayor volumen de ofertas de este tipo de estudios y suponen el 33 por ciento del total de programas de postgrado. Le siguen las áreas de ciencias sociales y las ingenierías, con el 18 y el 14 por ciento respectivamente.

De acuerdo con los datos del portal de empleo Infoempleo.com, el requisito de formación de postgrado o máster es exigido en el 5,9 por ciento de las ofertas. Según Jorge Guelbenzu, director general de la compañía, las empresas exigen a profesionales muy cualificados para dotar a sus compañías del mejor talento. El sector jurídico es el que más los valora, seguido de consultoría, sanidad y banca. Además, añade que es probable que este porcentaje aumente teniendo en cuenta los futuros cambios en la formación universitaria en la que se integrarán los grados de tres años y dos de máster; de forma que las empresas exigirán cada vez más esos dos años de postgrado para estar al nivel de las carreras de planes universitarios anteriores?.

Dentro de los másteres, existen los que habilitan el ejercicio de una profesión regulada y son obligatorios: Abogado o Procurador de los Tribunales, Arquitecto, Ingeniero, Psicólogo o Profesor de ESO, Bachillerato, Formación Profesional, de Idiomas, o Enseñanzas Artísticas y Deportivas. También se ha de cursar un máster si se quiere optar a realizar un Doctorado. El resto de másteres no serán obligatorios.

Por su parte, el rector de la Universidad Camilo José Cela, Eduardo Nolla, afirma que en la actualidad, algo menos del 20 por ciento [de los estudiantes] se incorpora al posgrado justo cuando finaliza un grado, mientras que el resto lo suele hacer varios años después?.

Francisco Michavila, director de la Cátedra UNESCO de Gestión y Política Universitaria de la UPM, afirma que lo que el Gobierno pretende hacer es portenciar los estudios de máster, la duración de dos años me parece adecuada pero es un pequeño paso, totalmente insuficiente si no se tienen en cuenta asuntos como la impartición en una lengua que los haga visibles para la comunidad internacional, o sea el inglés, y la imprescindible conexión de los programas de máster, como estudios avanzados que son, con líneas consolidadas de investigación.

Mejor empleo con posgrados

Los datos muestran que aquellos que se gradúan en estudios de postgrado (máster universitario y/o doctorado) alcanzan mejores resultados de empleo que los que son solo titulados en grado (o estudios de antiguo ciclo), según fuentes de la Fundación CYD. Hasta el momento solo se dispone de los datos para Galicia, Cataluña y Andalucía, pero en breve los habrá para España. Por ejemplo, en el caso andaluz y atendiendo a los graduados 2011-2012, un 48,8 por ciento de los egresados en máster oficial estaban trabajando, más de 8 puntos por encima del dato para los titulados en grado, que era del 40,4 por ciento. Con la crisis, los estudios de inserción laboral que se han realizado en estas comunidades autónomas ponen de manifiesto cómo han empeorado las variables de inserción. Por ello, cursar un posgrado o master facilita el acceso al mercado laboral en condiciones de menor precariedad y temporalidad.

De esto son conscientes una parte importante de los universitarios ya que, según el estudio Busco mi parecido, realizado por la escuela ESCP Europe, a pesar de que un 55 por ciento de los alumnos de último año asegura que, a día de hoy, no podría afrontar la inversión económica que supone un curso de postgrado, un 66 por ciento de ellos reconoce abiertamente su deseo de realizar un postgrado o master al finalizar sus estudios.

Otro dato a tener en cuenta es que, en la actualidad, los expertos apuntan a que las titulaciones no se adaptan al mercado. Así, Nacho de Pinedo, CEO de la escuela ISDI, asegura que la mayoría de los grados universitarios no se adecua a los puestos de trabajo que las empresas demandan. Nuria Esparza, directora de Atracción de Talento en Adecco, afirma que sin ser un requisito obligatorio, los candidatos que están en posesión de máster o posgrado, pueden tener más éxito en la búsqueda de empleo. Además de la formación, las empresas valoran otros aspectos que sí son definitivos, como los idiomas y las habilidades o aptitudes que demuestre el candidato. Por su parte, el vicerrector de Ordenación Académica y Profesorado de la Univesidad Pontificia de Comillas, Antonio Obregón, indica que las diferencias con otros sistemas universitarios radican en los másteres. Si la medida ahora adoptada en España implica un mayor seguimiento de los másteres oficiales (bastante reducido salvo en los casos de los másteres habilitantes para el ejercicio de una profesión), entonces sí que, en este punto, podría intensificarse la comparabilidad con otros sistemas universitarios.

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