Todos los 15 de mayo se celebra en Madrid la fiesta San Isidro Labrador, se trata de una de las fiestas más ansiadas por todos los madrileños.
Todos ellos, vestidos de chulapos y chulapas acuden a la pradera de San Isidro, situada en el barrio de Carabanchel, para festejar con emoción este precioso día.
Como no queremos perdernosla, lo vamos a celebrar desde nuestras casas.
Algunas ideas para convertir tu casa en la verdadera pradera de San Isidro.
Orígenes San Isidro Labrador
Antes de nada, vamos a repasar los antecedentes de este día tan especial. San Isidro Labrador nació el 4 de abril de 1082 y fue el patrón de los agricultores.
Se le conocía por tener un don especial para localizar agua con facilidad y se le atribuyen varios milagros relacionados con este elemento. Murió en el año 1130 y su cuerpo fue enterrado en la ermita de San Andrés.
Cuarenta años más tarde, el santo fue desenterrado y para sorpresa de todos, el cuerpo seguía intacto como si hubiese fallecido ese mismo día.
Poco después de la exhumación de su cadáver y su traslado al templo, el rey Felipe III que se encontraba gravemente enfermo, milagrosamente fue curado gracias al santo; por este hecho se le concedió el título de Santo.
Romería a la Ermita y pradera de San Isidro
La tradición, que se remonta al siglo XVIII, es acudir a la romería el 15 de mayo y beber el “agua del santo” que emana del manantial que se encuentra a las orillas de la Ermita de San Isidro.
La gastronomía está muy ligada a esta costumbre. El camino hacia la ermita suele estar lleno de puestos de comida artesanales donde se ofrecen los alimentos típicos de este día.
Por un lado, no pueden faltar los dulces típicos como las rosquillas de santo, las tontas sin recubrimiento, y las listas, que tienen por encima un rico glaseado de azúcar y los “torraos” garrapiñadas y manzanas caramelizadas.
Tampoco suele faltar la limonada:
Ni los churros con chocolate:
Si por el contrario te tira más el salado, lo típico para este día son gallinejas y entresijos, bocadillos de todo tipo y como no, un buen cocido madrileño.
Además de la romería a la ermita, la costumbre de este día, es acudir a la Pradera de San Isidro para bailar el tradicional chotis vestidos de chulapos, pasear con la familia, comer un bocadillo de tortilla sentados en la hierba y comprar las famosas y deliciosas rosquillas.
Para amenizar toda esta comilona, se suelen ofrecer infinidad de conciertos repartidos entre Las Vistillas, La Pradera, Arganzuela y La Rosaleda.
Trajes de chulapos y chulapas
La indumentaria es uno de los aspectos más característicos de este día. El origen de esta vestimenta se remonta a finales del siglo XIX y principios del XX, cuando por las calles de Madrid se encontraban diferentes personajes que, dependiendo del barrio en el que habían nacido y vivían, vestían de una manera o de otra correspondiendo a un determinado comportamiento social.
Los términos “chulapo” y “chulapa” se han convertido en el nombre genérico para denominar a los madrileños castizos. Sin embargo, en su origen estos eran llamados “manolos” y “manolas”. Ambos hacen alusión a los vecinos de la clase trabajadora los barrios de Malasaña y Maravillas.
Pasacalles de gigantes y cabezudos
El tradicional pasacalles de gigantes y cabezudos da todos los años inicio a las fiestas de San Isidro, desfile que se realiza antes de la lectura del pregón en la Plaza de la Villa a cargo de alguna personalidad famosa.
San Isidro 2020 en casa
Seguro que te han entrado ganas de montarte tu propia pradera de San Isidro en casa, por lo que vamos a darte algunas ideas para conseguirlo:
El primer lugar, deberás hacerte con la vestimenta tradicional. El traje de chulapo madrileño se compone de pantalón de pinzas negro, camisa blanca, chaleco gris con un clavel rojo y una boina.
Por otro lado, la chulapa lleva un vestido de lunares ceñido hasta los pies con un amplio vuelo en el bajo y un mantón con flecos sobre los hombros. En la cabeza un pañuelo blanco atado adelante con un clavel rojo. Además, los más pequeños de la casa también pueden lucir estos preciosos trajes.
Una vez te hayas vestido como manda la tradición, toca ambientar el salón o la terraza (si eres afortunado y tienes una) como si fuera la verdadera Pradera de San Isidro.
Para ello, puedes escoger diferentes variedades de plantas verdes y flores; y adornar con unos mantones hechos de papel. Teniendo ya la pradera montada, vas a necesitar un mantel de picnic para poder disfrutar de una buena comida.
Ahora hay preparar comida típica de San Isidro: la parte salada es fácil ya que puedes optar por preparar unos ricos bocadillos o el tradicional cocido madrileño.
En cuanto al dulce, te planteamos el reto de cocinar las deliciosas rosquillas de santo:
La música es otro de los elementos fundamentales que no puede faltar. Te proponemos practicar el chotis hasta que te salga perfecto y el año que viene poder lucir tus habilidades para el baile en la Pradera de San Isidro.
El chotis se baila en pareja al son de un organillo.
Durante el baile la mujer gira alrededor del hombre, que a su vez va girando sobre su propio eje, de ahí que se haya hecho popular el dicho de que «no se necesita más que un ladrillo» para
bailarlo.
Os presento los siguientes chotis para que podáis practicar:
Cada año se terminan las fiestas de San Isidro, con un gran espectáculo de luz y de color con los fuegos artificiales:
Esperamos que aunque sea de manera diferente, disfrutéis de este día como se merece.
¡Os deseo un feliz Día de San Isidro 2020!
OS PROPONGO UNAS MANUALIDADES PARA PASAR EL DÍA:
PODÉIS HACER UN CLAVEL:
PODÉIS HACER UN MANTÓN:
PODÉIS HACER UNOS FAROLILLOS:
O PODÉIS COLOREAR UNOS CHULAPOS:
